José Gabriel Cabrera Alva. Tristania y otros híbridos de la peste. Lustra Editores, 2023, 158 pp.

Resumen

Leemos siempre en función de nuestros gustos, intereses y preocupaciones, de acuerdo con nuestro referente histórico, literario y sociocultural. Anamari Gomís (1991) nos advierte: “Nadie lee inocentemente. Una caterva de referencias gira sobre nosotros cada vez que una frase nos inquieta [...] el placer que resulta de la lectura o de la contemplación de un asunto doloroso nos conduce a lo que Aristóteles concebía como catarsis” (p. 13). El ojo del lector agudo, dinámico, puede observar una serie de elementos estético-literarios, históricos e intertextuales en una obra; en cambio, para otros lectores neófitos y pasivos, lo anterior puede pasar simplemente desapercibido. Nos podemos identificar con la propuesta literaria, de cualquier género, por la empatía con los personajes, los temas tratados, la sensibilidad que plasma el autor en su texto, el estilo, los recursos del lenguaje y la agilidad para referir una historia. Las épocas de crisis humanas, sociales y políticas, sin duda, han dejado huella en el arte en general y han marcado el rumbo, en este caso, en la literatura. Tómese como ejemplo la coyuntura sociopolítica en el Mé- xico de fines del XIX y principios del XX, que provocó una revolución de alcance nacional que dio identidad a la literatura, en la que se reflejan la multiplicidad de miradas, reflexiones y posiciones políticas. Se trata de la novela de la revolución en la que encontramos nombres como Mariano Azuela, Martín Luis Guzmán, Nelly Campobello, Rafael F. Muñoz, entre otros.